Good Trip es un emprendimiento enfocado en productos higiénicos para mascotas que son biológicamente apropiados, es decir que cumplirán con su propósito tomando en cuenta la naturaleza del animal y sus necesidades específicas; siendo también respetuosos con el medio ambiente y utilizando en su mayoría insumos e ingredientes naturales.
Las creadoras de los productos se acercan a nosotros con esta genial idea pero sin tener un nombre ni dirección conceptual de marca alguno, sabiendo que su grupo objetivo era el de personas responsables del bienestar de sus animales, a quienes más que mascotas, las consideraban como parte de la familia, pero entendiendo que son animales con una biología propia y necesidades específicas.
Solución
Esta marca se conceptualizó dentro de la idea de que esos animales son realmente nuestros compañeros, nuestros familiares, nuestros hijos o mejor aún nuestros “Copilotos de Vida” con los que queremos tener mil aventuras, llevarlos al mar, viajar por la montaña, irnos de road trip por el país dejándolos ser perros felices, que se ensucian, se revuelcan en el lodo, corren bajo la lluvia y disfrutan de la naturaleza por que son parte de ella; luego podemos pensar en limpiarlos, bañarlos y cuidarlos con productos que también son naturales y buenos no solo para nuestra higiene, sino también, son terapéuticos y que les ayudaran a tener una mejor salud y bienestar.
De lo anterior viene el nombre Good Trip, porque queremos ser parte de ese buen viaje y llevar a tus “copilotos de vida” hasta el destino de la limpieza, recorriendo el camino de lo natural.
Para esto desarrollamos un branding aventurero, con un isotipo equilibrado pero con acabados más orgánicos que representa la diversidad de la naturaleza, interactuando con una parte humana pero aventurera. Además se desarrolló una línea gráfica muy colorida basada en los “bumper stickers” o esos stickers que vamos coleccionando en nuestra maleta al viajar por distintos destinos.
La marca también tiene un tono y manera bien definido que va desde lo atrevido hasta lo rudo, pero es que esta marca no es para cualquiera; y así logramos definir mejor aún el grupo objetivo al que la marca quería comunicar, es un tono amigable pero concretamente disruptivo, eso sí, sin olvidarnos del lenguaje técnico que es necesario para que el consumidor sepa que sabemos lo que estamos haciendo y que pueden confiar en nuestros productos.